Es carminativo, expectorante, diurético, aperitivo, tónico, estimulante, estomacal, antiescrofular, afrodisíaco. Cuando el perifollo es fresco aporta gran cantidad de minerales y vitaminas, destacándose sus propiedades medicinales, actúa como diurético y depurativo sanguíneo, estimula el apetito, ayuda en la digestión y tiene cualidades cicatrizantes en heridas en la piel.